Esta es una de esas historias que, no sé, de vez en cuando te tocan la fibra. Verás, el mozo en cuestión se llama Gregory Lemarchal y con 24 años ganó el año pasado la versión francesa de O.T. (que allí se llama Star Academy)
Pues bien..ganó. El tío canta bastante bien y en cuestión de semanas se hizo un auténtico ídolo de masas. Incluso llegó a cantar en el Olympia de París, que es como la meca de los artistas franceses..
Pero al poco tiempo murió víctima de una enfermedad degenerativa, concretamente fibrosis quística, que encima es hereditaria. Su muerte fue toda una conmoción en Francia..y cuando lo leí en el periódico me impresionó. Son esas contradicciones que tiene la vida, que lo mismo te sube a lo más alto para hacerte caer en cuestión de segundos. Entré en Youtube arrastrado por el morbo y aluciné con su estilo de cantar… bueno, a ver si os gusta.
Simplemente tengo que decir algo:
Es una de las mejores voces que ha existido y una persona excpecional.
Un año sin el y aun lo resiento