Se acabaron los encierros por este año. El último día ha coincidido en domingo y por eso han programado a los Miuras, una ganadería de respeto pero que suele protagonizar carreras rápidas y limpias. Más o menos así ha sido, aunque se han registrado algunas cornadas, la más grave la de una joven australiana en la bajada al callejón y que ha sido corneada cuando quería subir, sin éxito, al vallado. Parece mentira cómo se mete esta gente a correr como si se tratase de una juerga más.
Por lo demás, emoción, riesgo..algún que otro trompicón por parte de la manada que, sin cabestros, se ha colocado en cabeza..y mucha mirada puesta en la entrada del callejón después de lo sucedido ayer. Hoy no había «pasillo» para los forales.
Hoy se acaban las fiestas con el Pobre de mí y, con ello, la cita diaria con el encierro. El año que viene, más.
El Traje de los Domingos 